Verdades y mentiras sobre la dieta

Mucho oigo hablar y leer sobre las dietas. Yo creo que quien quiera hacer una dieta, ésta tiene que ser personalizada, es decir, lo mejor es ir al endocrino para que, una vez conocida la dieta que llevas actualmente, pueda elaborar una a medida. Yo lo siento pero no creo en la dieta Dukan, ni la de la alcachofa ni otras. Puede ser que pruebes esa dieta y casualmente a tí te vaya bien, pero será más una casualidad que realmente sean efectivas para todo el mundo.

Yo creo que internamente, más o menos todos sabemos lo que nos engorda, pero no estamos dispuestos a renunciar a ello, es normal. En mi humilde opinión, no es necesario hacer una dieta estricta (a menos que sea un caso ya de obesidad o un problema grave), pero para perder esos kilillos de más que podemos coger (sobre todo con el famoso tapeo veraniego), lo mejor es equilibrar la dieta y actuar con sentido común en base a las recomendaciones que, más o menos, aparecen en casi todas las revistas:

La clave es realizar 5 comidas al día:

1. Que la comida más calórica sea la del desayuno: cereales, o algo de pan con embutido suave como puede ser pavo o jamón dulce o jamón ibérico, queso tierno o fresco o bien tostadas con mermelada y un buen zumo de fruta, y, si nos gusta (que no es mi caso), pues café o café con leche.

2. Tomar un tentempié a media mañana (muy recomendable tomar entonces una buena infusión de té verde o rojo).

(si se trabaja, aunque no es lo ideal, se puede comer a primera hora de la mañana un zumo de frutas y unas galletas integrales o algun otro tentempié y luego desayunar en el trabajo -punto 1-, porque es muy difícil desayunar tan completo antes de ir al trabajo, al menos, a mí me cuesta mucho porque siempre voy con el tiempo justo y a esa hora no tengo tanta hambre).

3. Comer al mediodía verduras, ensaladas verdes o de pasta o arroz y luego carne magra, sobre todo de conejo o pavo. También de pollo sin piel y alguna vez carne roja de ternera. Tomar fruta de postre.

4. A media tarde, tomar un tentempié lácteo: yogurt o vaso de leche desnatada o, a veces, algo de pan con un poco de chocolate y una infusión de té verde o blanco o fruta.

5. Cenar básicamente un plato de verduda de cualquier tipo o una sopa de caldo de verdura casera y luego, huevos o pescado. De postre alguna infusión relajante.

y... sobre todo beber mucha agua o infusiones o caldos.

Siguiendo, más o menos una dieta de este tipo, se puede mantener el peso perfectamente o incluso perderlo (en función de cada caso).

Tengo que reconocer que mi "asignatura pendiente" es la de beber mucha agua. Tomo muy poca agua, y, la verdad, es que se nota, a veces me siento algo hinchada.